En este pintoresco pueblo encontrarás una gran variedad de pequeñas calas de arena negra, característica que da nombre al lugar y que es un gran reclamo para turistas nacionales e internacionales. En el pueblo encontrarás un pequeño paseo por el que disfrutar de la belleza de sus aguas y numerosos restaurantes pequeños situados en plena playa y con vistas al mar. En ellos podrás saborear la delicia del pescado fresco de Lanzarote y muchos otros platos tradicionales.
Si quieres tomar el sol y disfrutar de sus aguas, también podrás hacerlo en alguna de sus calas. Además, sorprendentemente, sus aguas son completamente cristalinas y, al contrastar con la oscuridad de su arena, crea un ambiente mucho más misterioso y pintoresco. En cuanto a los vientos, en Playa Quemada disfrutar de su ausencia ya que el pueblo se encuentra protegido por el Monumento Natural de Los Ajaches, lo que convierte al lugar en una de las zonas con mejor clima constante de Lanzarote.