La principal atracción turística de Nazaret, y por lo que en realidad es conocido este pequeño pueblo, son las casas-cueva incrustadas en la montaña, especialmente, la que dicen que fue la casa del actor egipcio Omar Sharif, aunque él lo desmintió años después.
Pese a ello, todo el mundo quiere conocer este singular enclave, convertido hoy en día en el museo-restaurante Lagomar, una extraña villa diseñada por el arquitecto local César Manrique, encajada en una cantera de piedra volcánica y construida con escaleras zigzagueantes y una estructura fuera de lo común, con un lago, jardines exóticos y túneles.
Este enclave se ubica entre montículos de lava negra de un volcán, en una antigua cantera que hoy funciona como museo y como restaurante, El Balagué, donde también se organizan conciertos y se puede escuchar jazz en vivo.