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Lanzarote es una isla llena de encantos, un paraíso mucho más amplio que sus aguas cristalinas y sus arenales blancos. ¿Sabías que casi la mitad de la isla es terreno protegido? Esto nos habla de su gran valor pero hay otras curiosidades de Lanzarote muy interesantes.
1. Uno de los tubos volcánicos más largos del mundo
Un tubo lávico es una cueva volcánica con forma de túnel y en Lanzarote puedes encontrar uno de los tubos volcánicos más largos del mundo. Se encuentra al norte de la isla y mide casi 7 kilómetros de longitud.
Se formó hace miles de años, tras la erupción del Volcán de la Corona, que tuvo lugar antes incluso que la del Timanfaya, y se conoce como Túnel de la Atlántida.
Su parte final -de aproximadamente un kilómetro y medio- se encuentra sumergida bajo el agua, formando el tubo subacuático más largo del mundo.
Dos de los lugares más emblemáticos de Lanzarote forman parte de este túnel volcánico: la Cueva de los Verdes y los Jameos del Agua.
2. Viñedos volcánicos
Otra de las curiosidades de Lanzarote más impresionantes son sus viñedos volcánicos. Están en La Geria y aprovechan los cráteres para el cultivo de la uva Malvasía Volcánica, una variedad con la que se produce un vino único.
Cultivar vides de esta forma es posible gracias a que las cenizas volcánicas ayudan a mantener la humedad de la tierra. Esto ha hecho que el paisaje se convierta en un inusual campo de hoyos y muros de piedras volcánicas.
Se pueden hacer tours para ver de cerca este espectacular paisaje, en el que contrasta ese tono oscuro de la tierra con el verde de las vides. Y nada como terminar el recorrido con la visita a una bodega para probar esos caldos resultantes.
3. Una laguna de color verde
El Charco de los Clicos es una de las curiosidades de Lanzarote más asombrosas. Se trata de una laguna de color verde intenso que debe esa tonalidad al azufre y al tipo de algas que crece en sus aguas.
Se encuentra cerca de Los Hervideros, al sur de la isla, y ofrece una estampa de lo más peculiar, en contraste con el negro de la arena, el rojo de la tierra y el azul del océano.
La laguna se sitúa enfrente de un cráter semi hundido y se nutre del agua marina a través de grietas subterráneas, pues no está físicamente junto al mar.
4. Hierve el mar
Los Hervideros son unos acantilados que se formaron cuando la lava se volcó hacia el mar tras la erupción del volcán Timanfaya. Eso dio lugar a estas formaciones rocosas y cuevas submarinas en las que se produce un fenómeno natural impresionante.
Al colarse las olas del mar entre los agujeros de las rocas, el agua sale en vertical provocando una gran cantidad de vapor. Esa sensación de que el mar está hirviendo es lo que da nombre a este enclave, ubicado en la costa oeste del Parque Nacional de Timanfaya.
5. Un museo bajo el agua
En Playa Blanca, una de las zonas más turísticas de la isla, se puede encontrar una de las grandes curiosidades de Lanzarote. Se trata del Museo Atlántico, situado frente al Castillo del Águila.
Su particularidad es que se trata del único museo subacuático de Europa. Se ubica a unos 12-15 metros de profundidad y en él se pueden ver las obras del artista Jason DeCaires Taylor.Para poder contemplar las decenas de estatuas de forma humana de este peculiar museo debes practicar submarinismo. ¡Un espectáculo sólo apto para los más intrépidos!
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