Gofio canario: una receta deliciosa

Origen del gofio canario

Uno de los símbolos de la cultura y la gastronomía canaria es el gofio canario, un producto que no te puedes perder en tu visita a Lanzarote.

En su origen, este alimento era básico en la dieta de los aborígenes canarios por su alto valor nutritivo, sobre todo en las épocas de hambrunas. De hecho, fue base del sustento de la población local durante la Guerra Civil española y, cuando partían barcos de emigrantes clandestinos hacia América desde el archipiélago, era una provisión indispensable gracias a que podía conservarse durante mucho tiempo en buenas condiciones.

Se trata de un alimento prehispánico -anterior a la llegada de los colonizadores- de origen bereber que podía prepararse de diferentes maneras. Con el paso del tiempo se fueron añadiendo ingredientes a su proceso de elaboración.

Te estarás preguntando qué es exactamente el gofio canario. Básicamente, es una harina hecha a base de cereales tostados y molidos. En un principio se utilizaba cebada, trigo, lentejas y rizomas de helecho. Y en el siglo XVI se añadieron nuevos ingredientes como el centeno o el millo, procedente de América, que no es otra cosa que maíz.

 

Ingredientes del gofio canario

El gofio canario es el alimento más conocido del archipiélago junto con los plátanos. Y puede prepararse de diferentes maneras. Para esta receta, vas a necesitar los siguientes ingredientes:

• 200 gramos de trigo y maíz (gofio).
• Una cucharada de azúcar.
• Una cucharada de sal.
• Un vaso de agua.
• Aceite de oliva.
• Opcional: nueces, almendras, plátano y miel.

El gofio canario tiene un aspecto parecido a la harina blanca pero con un tono más amarillento.

 

Elaboración del gofio canario

La elaboración del gofio canario no es complicada y solamente necesitas unos pocos pasos para conseguir este plato. ¿Qué tienes que hacer?

1. Mezcla la sal y el azúcar en un vaso y disuelve la mezcla en un vaso de agua.
2. Tuesta el trigo y el maíz y ponlo en un recipiente amplio.
3. Añade aceite y remueve el gofio poco a poco mientras vas agregando el agua.
4. Cuando consigas una mezcla homogénea, amasa con las manos.
5. Cuando esté todo ligado, haz un cilindro con la masa y redondea los bordes.
6. Cubre el cilindro con papel film y mételo en el frigorífico.
7. Pasados 30 minutos, saca el gofio de la nevera y córtalo en rodajas gruesas.
8. Al servirlo, puedes añadir nueces, almendras, plátano o miel.

El gofio canario se suele servir como acompañamiento o aperitivo. Pero en otras recetas puede servirse con caldo, leche, agua, vino o miel.

Otra de las formas de preparación más populares es hirviendo un caldo casero de pescado y mezclando la harina de gofio hasta tener una pella sin grumos. En este caso, se conoce como gofio escaldado y, curiosamente, puede comerse como si fuera un humus pero utilizando trozos de cebolla a modo de ‘cuchara’.

En cualquier caso, el gofio canario está considerado como un superalimento por su alto valor energético, ya que se elabora con diversos tipos de cereales y, en ocasiones, también con leguminosas como los garbanzos. En el gusto de cada cual también está el nivel de tueste del cereal utilizado para su elaboración, ya que no sólo cambia el color sino también el sabor: cuanto más oscuro, más intenso. ¡Tú eliges!

 
 

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